Tres lunari han desaparecido desde que todo comenzó. Quizá soy la única que todavía mira a Lunaris, quien aún recuerda su nombre. Pronto, yo me iré y la luna continuará sola.
Mi esposo ha vuelto y me busca. Mi esposo muerto me da caza. Corin y también mi tío. Los cadáveres se levantan y caminan y se alimentan. Mis niñas, ahora caminan... y se alimentan.
Dios nos ha abandonado. Lunaris es mi testigo. Esta noche, regreso a mi familia.