Lore
- El círculo
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El Círculo opera por fuera de cualquier resto de "ley" que exista por estos lares. Pero la ilegalidad no excluye a la civilidad, y no necesita causar caos. Si alguien tiene la intención de tomar lo que no le pertenece, es mejor contar con un profesional que se encargue para evitar violencia y confusión innecesarias.
El Círculo celebra contratos con quienes buscan una solución profesional para la... mala asignación de recursos. Distribuimos a los miembros en base a los requerimientos del trabajo, y cobramos una comisión. Todos ganan, excepto el objetivo de nuestro trabajo. -
El Círculo opera en base a favores. Las monedas nos permiten monitorear esos favores, y estar seguros de que nadie se esté aprovechando de otro miembro del Círculo, ni esté sufriendo esos abusos. Además, gracias a las monedas llegaste aquí. Disculpa si eso te pareció obvio... En ocasiones debo tratar con personas cuyos talentos... no se relacionan con el intelecto.
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¿Lo que escucho es el tintineo de monedas en tus bolsillos? Obtenidas de alguna de tus víctimas, o quizá de la víctima de alguna de tus víctimas. Es imposible saber hasta dónde llega esa cadena, pero ahora son tuyas, y pareces gozar de buena salud. El vencedor obtiene... etcétera. Parece que era a ti a quien he estado esperando tan pacientemente. Sí, tú servirás.
Pon una moneda en tu mano. Di estas palabras en tu mente: El Círculo nos une a todos, y no haré daño a quienes se encuentren en su interior.
Te veré pronto. -
Las cosas que tú o yo consideramos valiosas pueden no serlo para el Jefe o Faustus. Allí donde tú ves una baratija, otro puede ver una reliquia preciosa, o la pieza final de una colección de toda la vida. Los contratos habilitan a los clientes a contratar al Círculo para procurar artículos que no tengan valor objetivo en nombre del cliente. En ocasiones, el valor surge de saber que el dueño original ya no lo tiene en su poder.
El Círculo no hace juicios de valor respecto de lo que hemos de obtener. Si el artículo no está respirando y no es capaz de poner en riesgo al Círculo en sí, no rechazaremos un contrato. Y tú tampoco deberías.
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Aunque los contratos mantienen al Círculo girando, somos profesionales habilidosos, y los profesionales habilidosos desean poner a prueba los límites de sus habilidades. El Círculo ha obtenido los planos de lugares que son conocidos por albergar objetos de gran valor. Naturalmente, estos lugares están muy bien protegidos y custodiados, y llevar a cabo un trabajo en lugares así requiere un equipo.
El Jefe estará feliz de otorgar los planos de estos lugares fuertemente protegidos y el acceso a las habilidades y los recursos necesarios para que el lugar quede completamente vacío... por un cierto precio. Completa contratos, obtén monedas, y podrás utilizar esos servicios. -
Dóminus fue un ser humano terrible, pero el Círculo le debe mucho. Si no hubiera exiliado a tantos con tal entusiasmo, el Círculo no tendría tanto talento disponible para elegir. El Jefe mismo aprendió mucho sobre el poder del anonimato y de los mitos gracias a Dóminus. Lecciones que emplea hoy en día.
- El Jefe
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Hace tiempo serví a una Sekhema digna. El Jefe no es ninguna Sekhema. Gobierna a base de engaños, confusión y manipulación. Sin embargo, si pacta algo, lo cumplirá. Esa es una forma de honor que puedo respetar.
Él espera lo mismo de nosotros. A cambio de un lugar aquí, he accedido a usar mis habilidades para posibilitar los viajes en esta condenada pila de excremento de rhoa, y eso es lo que haré. Mi palabra es mi juramento. -
Ah, el Jefe. El gran hombre. El hombre de los mil rostros, o de ningún rostro, dependiendo de a quién le preguntes. Ha cultivado una buena reputación, ¿mmm?
Me considero un conocedor de la verdad, y todavía no he oído una historia del Jefe que proyecte esa sensación maravillosa que solo logran las historias reales. Pero...
Bueno, tengo algunos contactos, y esos contactos tienen ciertos contactos que han obtenido verdades muy impactantes sobre esta misteriosa figura.
No voy a revelar nada a un ladrón, pero déjame decirte algo. ¿Esas historias ciertamente falsas que escuchas por doquier? La verdad es mucho más extraña. -
Es un hombre interesante. Muy interesante. No tiene ni un cabello, como el día en que vino al mundo. Verás, no necesita a alguien de mi oficio. Y sin embargo, aunque sea calvo, conoce el valor de un buen barbero.
Nadie aquí sabe demasiado sobre el pasado del Jefe, excepto quizás Kurai, y ella no te dirá mucho, ni siquiera a cambio de una montaña de monedas. La lealtad es la moneda más valiosa, y ella y el Jefe tienen una cantidad ilimitada.
Traté de descubrir lo que pude. Historias contradictorias de un líder contrabantista, un aristócrata teopoliano, y, aunque suene raro, un campeón retirado de la arena. Luego Kurai me dijo que deje de meter mis narices o terminaría como el último barbero. O quizá dijo quesería el último barbero. Como sea, valoro mi vida y mi trabajo más de lo que valoro los chismes sobre un traficante viejo, calvo y gladiadoral. -
Escuché que el Jefe comenzó como un caballerizo en la Gran Arena. Solía alimentar y cuidar a los caballos de los carruajes. Ese fue su primer trabajo, y que lo llevó a su primer… ehm, "trabajo".
Aparentemente, alguien le pidió que pusiera algo en el comedero del mejor semental de la familia Octavius, el favorito para ganar la carrera. Le pagaron lo equivalente a una semana entera de salario. El Jefe supuso que sería algún veneno, así que esperó a que el hombre apostara, y envenenó ese caballo también. Ninguno murió, pero ninguno ganó, y el Jefe, que había apostado su salario en el caballo que sabía que podía ser un gladiador, se llevó mucho dinero.
Obviamente, ese fue el último día de su lucrativo trabajo en la arena. El hombre acechó en los establos durante meses tratando de encontrarlo. -
En verdad nunca planeé una vida de crímenes. Sí, la mayoría de quienes trabajan en mi profesión terminan mendigando o robando, pero mi carrera no paraba de ascender, hasta que fui acusada de
Lujuria monetaria y exiliada.
Sucede que el Jefe, como forma parte de la élite cultural, me vio en algunas presentaciones. Debe haber notado mi habilidad para encarnar cualquier rol, y de no solo convertirme en el personaje, sino en la persona. Me dijeron que él mismo practicaba las artes, durante su juventud. Obviamente, tiene buen ojo para el talento.
Me muero por representar algún diálogo con él. Es difícil encontrar buen material por aquí, pero encontré una pieza de un tal Bestel flotando en la espuma. No es particularmente entretenida, y el enfoque que recibe la protagonista femenina desde la dirección es francamente dañino, pero al menos es algo.
Desgraciadamente, Kurai lleva la agenda del Jefe, y me dijo que está ocupado indefinidamente. ¡Imagina lo que es tener trabajo lucrativo durante los próximos meses! Una actriz puede soñar...
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El Jefe es un hombre elegante. Un ladrón obviamente quiere ser rico y vivir una vida de lujos, pero una vez que alcanzas un cierto nivel de riqueza, supongo que encuentras otras motivaciones.
Aparentemente, el Jefe estaba viviendo muy cómodamente pero sintió la necesidad de desafiarse a sí mismo. Entró al Primer banco de Teópolis durante el día, se metió a una bóveda y empezó a... mover cosas. La fortuna de la familia Octavius a la caja de depósito de los Maxius, las riquezas de Avarius a muchas cajas fuertes pequeñas que se abrieron como si no hubieran estado bloqueadas. Mezcló todo el dinero como si lo hubiera agarrado la marea. Después buscó los registros de depósitos y extracciones y los prendió fuego. Salió como si nada hubiera pasado.
Bueno, obviamente el banco apagó el fuego, pero los registros habían desaparecido. Así que notificaron a sus clientes y les dijeron que se acerquen con sus copias de los depósitos... ¿y a que no adivinas? Ya no existen tampoco.
No tengo idea de cómo lo hizo. Por supuesto, el banco y todos los clientes negarán que ocurrió. Seria tonto que no lo hicieran. -
El Jefe es tan privado que es paranoico. Nunca fui a su casa, pero dicen que pide cosas muy particulares a sus invitados. Nada de botas. Nada de capas ni abrigos. Nada de gorros. Nada de pantalones. Nada de vestidos. Se desaconseja mucho la ropa interior. Te dan una túnica para cubrirte. No tiene mangas. No puedes entrar a su cocina ni acercarte a él por detrás ni desde los lados. Ni desde arriba. Nunca jamás desde arriba. Y ni hablar de acercarte desde abajo, pero escuché que vive bajo tierra, así que eso sería bastante complicado.